Más que una dieta o una forma de vida, el veganismo es un movimiento social y político destinado a liberar a los animales del yugo humano. Al oponerse al carnismo, los veganos y las veganas renuncian todo lo posible a utilizar productos o servicios derivados de su explotación. Sus argumentos reciben en la actualidad una respuesta cada vez más favorable entre los consumidores, a pesar de que los animales, sean de tierra o mar, nunca han sido exterminados en cantidades tan grandes. Con este ensayo, Valéry Giroux y Renan Larue demuestran que la sociedad que la comunidad vegana reivindica (y prefigura a través de sus prácticas diarias) se basa en una concepción más amplia de la justicia. Justicia que debería abarcar a todos los seres sintientes.