FINALISTA DEL PREMIO BOOKER
LA ESPERADA NUEVA NOVELA DE ELIF SHAFAK, CON 300.000 LECTORES Y TRADUCIDA EN CINCUENTA PAÍSES
«Elif Shafak puede ser despiadada, lírica, política, íntima. [...] Dentro de esta novela conviven otras tantas, todas ellas conmovedoras, espléndidas y escritas con elegancia.»
Juan Gabriel Vásquez
El cerebro permanece activo unos diez minutos después de que el corazón deje de latir. Durante ese lapso, mientras el cuerpo de Leila yace en un contenedor de basura a las fueras de Estambul, el tiempo fluye y, minuto a minuto, le trae un nuevo recuerdo: la infancia con su padre y sus dos madres en una casa grande y antigua de una apacible ciudad de Turquía; los chismorreos de las mujeres cuando los hombres están en la mezquita; la huida a Estambul para escapar de los abusos y las mentiras familiares y de un matrimonio concertado; el amor hallado de manera inesperada en el burdel de Mamá Amarga... Y los cinco amigos que hace en el camino «su verdadera familia» y que, mientras agoniza, tratan desesperadamente de encontrarla.
El Jurado del Premio Booker 2019 ha dicho:
«La narrativa audaz e increíblemente original de Shafak resucita el inframundo de Estambul a través de los vívidos recuerdos de una trabajadora del sexo, Tequila Leila, cuyo cadáver yace en la basura. [...] Una obra de atrevida imaginación que empuja al lector al vertiginoso mundo de una heroína irresistible, con una terca determinación y un fiero optimismo: un personaje inolvidable cuya muerte, aun anunciada, recibimos como un golpe devastador. Valiente y enormemente cautivadora, esta novela da fe del poder de la amistad y del espíritu del ser humano.»
La crítica ha dicho...
«Una novela cercana a la muerte que celebra el sentido de la vida.»
Begoña Alonso, Elle
«Lírica y demoledora.»
Juan Manuel Freire, El Periódico de Cataluña
«Esta novela no es buena: es buenísima. [...] Magnífica. [Shafak] es una escritora maravillosa y su libro está lleno de hallazgos lingüísticos y pirotecnias verbales.
Benjamín Prado
«Un misil contra el patriarcado, contra la violencia sexual, el abuso de menores y un canto sobrecogedor a la amistad.»
Felip Vivanco, La Vanguardia
«Las dotes de Shafak como escritora -su ritmo seguro, su honestidad emocional y su conciencia política- cohesionan las dos mitades, formando un todo absorbente y conmovedor. El jurado del Booker eligió esta novela como una delas seis mejores de este año. La novela se merece sobradamente el honor. Shafak escribe con vista, valentía y compasión. Su novela es un deslumbrante retrato de una ciudad, una sociedad, una pequeña comunidad y un alma individual.»
Julia Phillips, El Cultural de El Mundo
«La undécima novela de Shafak es sencillamente eléctrica y, al tiempo, el susurro disidente de todas las cuitas humanas. Un 9.»
Ángeles López, La Razón
«Shafak lleva a la literatura lo que muchos escritores desean dejar fuera. Pasemos más de diez minutos y treinta y ocho segundos en este mundo de lo extraño. Shafak ha creado un nuevo hogar de palabras para nosotros.»
Colum McCann
«Intensa y sensual. Una novela que da voz a los desposeídos, a los intocables, a los maltratados, a los abandonados, y que transforma su canto doloroso en pura belleza.»
Francesca Segal, The Financial Times
«Un libro brutal, crudo e implacable en su retrato de la violencia, el sufrimiento y la aflicción, pero que a fin de cuentas reivindica la vida.»
Mirza Waheed, The Guardian
«Shafak ofrece una crítica mordaz a una cultura que pretende proteger el honor de las mujeres pero al mismo tiempo las desecha con fiero entusiasmo.»
Ron Charles, The Washington Post
«La narración de Shafak es siempre ágil, con una notable fuerza visual.»
Antonio Elorza, El País
«Shafak indaga en el papel de la mujer en una sociedad donde la libertad no siempre es un bien común, al alcance de todos.»
Culturamas
«Gracias a Shafak, las voces de mujeres como Nalan y Leila no volverán a ser silenciadas.»
Melissa Katsoulis, The Sunday Times
«Belleza en la basura. En lo crudo. En el infierno. La belleza está ahí, en todas partes. Pero para verla hay que saber mirar. Y Elif Shafak sabe hacerlo.»
Dorothy con tacones