En este divertido libro, el detective londinense Sherlock Holmes, junto con su inseparable amigo, el doctor Watson, y su perro Toby, han de resolver unos cuantos casos.
Con la ayuda de una lupa, una tarjeta reveladora y un cuadro de descodificación que van incluidos en el libro, se plantean más de 60 juegos (enigmas visuales, crucigramas, jeroglíficos, mensajes secretos, juegos de observación) en los que hay que deducir, calcular, descodificar, adivinar...
Un libro con los pasatiempos más ingeniosos para hacer pasar un buen rato a los niños.