La obra trata de reconstruir los aspectos fundamentales de la gramática latente en el Diccionario de Autoridades, mediante el despojo e interpretación de los términos caracterizados como voces gramaticales y de aquellos otros que, sin recibir tal caracterización expresa, contienen una definición atingente a ese dominio. Se consigue apreciar la convergencia o distanciamiento entre la doctrina gramatical ofrecida por los términos «técnicos» (de la gramática) y la doctrina gramatical aplicada a las voces de la lengua. Otro aspecto interesante es el examen de qué ideas gramaticales de la tradición lingüística han llegado a fijarse y cómo se han constituido y expresado los conceptos gramaticales en el Diccionario, al tiempo que inserta las ideas de esta obra académica en las grandes tradiciones reconocidas en la historia de las ideas lingüísticas, especialmente hispánicas.